El status adquirido:

Socialización

Aprendizaje en el proceso de socialización

1.- Pautas de comportamiento, también denominadas papeles sociales o roles y que corresponden a las distintas posiciones o status que los individuos pueden ocupar en sus relaciones.

El status y el rol se diferencian conceptualmente pero se relacionan, ya que al status le corresponden expectativas de roles. El status se recibe o se adquiere y los roles se aprenden y se integran.

Las pautas de conductas son aquellos modelos o guías de comportamiento que nos indican a priori cómo deberíamos comportarnos ante la sucesión de determinadas situaciones, especialmente en lo que respecta a la vida en comunidad.

Las actividades en una sociedad se distribuyen según unas pautas culturales que imponen distintos papeles a desempeñar (roles) y posiciones a ocupar (status).

La cultura y el grupo deben orientar así al individuo dentro de la sociedad, proporcionándole una serie de satisfacciones y obligaciones, de derechos y deberes recíprocos entre los miembros.

El Rol

El papel o rol, es el conjunto de actitudes, modos de comportamientos o convicciones, que se esperan despliegue un individuo según la posición que ocupa y las tareas y modos de conducta que se relacionan con ella. El rol se experimenta como una vivencia interior y un mandato interno, en cuanto a los derechos y las obligaciones ligadas a él en un determinado contexto. Se pueden desempeñar muchos roles sociales, como por ejemplo el de esposo o esposa, padre o madre, hijo, hermano, jefe, subordinado, patrón, profesional, maestro, alumno, adversario, colaborador, competidor, consumidor, hombre, mujer, joven, niño, etc. De todos los roles sociales se espera una forma de comportamiento, una determinada actitud que responde a un conjunto de valores, que pueden ser distintos según los sexos o la edad. Cuando el rol es ambiguo, por ejemplo el del adolescente, que no es ni un niño ni adulto, o el del homosexual, que no es ni hombre ni mujer, se produce un conflicto, por falta de aceptación social, rechazo, discriminación, prejuicio y carencia de modelos fijos como parámetros.

En Sociología el concepto de rol alude a los comportamientos típicos de determinadas situaciones sociales, que no inventamos nosotros, sino que nos los encontramos definidos por la sociedad y la cultura (le rol de juez, el de policía, niño…)

El rol es el comportamiento social esperado de una persona que adquiere un estatus particular.
La personalidad social es la suma de todos los roles que desempeña el individuo. Para Newcomb el rol consiste en expectativas de conducta. Esto indica que los comportamientos característicos de un rol determinado son siempre esperados por los otros con los que actuamos cuando desempeñamos dicho rol. En este caso hablamos de los otros como contrarroles. Así, el rol de padre tiene, al menos, dos contrarroles, el de madre y el de hijo.

Son características del rol:

Es un conjunto de expectativas compartidas por cierto número de personas, con carácter normativo, acerca de la conducta de quienes ocupan posiciones específicas en una estructura social.
Estas expectativas implican que los miembros del grupo comportan percepciones en relación con la posición que ocupa cada persona dentro de él, o en determinadas situaciones sociales.
Implica el desempeño de una conducta característica, típica de la posición de quienes la ocupan.
Esa conducta se estructura como un patrón, que implica igualmente una serie de actitudes ligadas a la situación.
Una persona puede desempeñar varios roles simultáneamente.

El Status.

Para Linton, el estatus es el conjunto de derechos y obligaciones inherentes a una determinada situación social.

Actualmente por estatus hay que entender la reputación, la fama, el rango o categoría social que tiene una persona.
Es el nivel o posición social de un individuo dentro de un grupo o de un grupo en relación a otros grupos.
También se entiende por estatus el conjunto de derechos que pertenecen a una posición social determinada.
Desde la perspectiva de la psicología social, estatus es la imagen social que a una persona le conceden los demás, imagen que viene dada en términos de prestigio.

Las fuentes del estatus pueden ser el sexo, la raza, la edad, la religión las creencias políticas y el nivel económico. La sociedad se puede considerar como un sistema complejo de posiciones o situaciones relacionadas entre sí. El individuo ocupa varias de estas posiciones, cada una de las cuales lleva consigo una serie de supuestos compartidos sobre las funciones que debe realizar. Estas posiciones son el status y el comportamiento que se espera de los individuos que las ocupan son los roles.

El estatus tiene una dimensión horizontal que consiste en una red de relaciones, contactos, intercambios, reales o potenciales de un individuo con os individuos de su mismo nivel. Tiene otra dimensión vertical, que es el conjunto de relaciones jerárquicas de un individuo con los que en su grupo o en su organización ocupan un estatus superior o inferior.

Los criterios de atribución de estatus son:

la edad
el sexo.
el parentesco
los factores sociales

El status es el puesto que le corresponde a cada miembro en un sistema social. El concepto de status se refiere, desde el punto de vista formal, al rango de la jerarquía que se ocupa en un grupo, con la capacidad para influir sobre los demás integrantes y sobre el desarrollo de esa organización. Corresponde a la cualidad de status la jerarquía militar, los maestros en una escuela, el director de una empresa, los jefes de cualquier grupo de trabajo, el padre de familia y todo aquel que tiene una función de autoridad. El término status también se relaciona al prestigio que un individuo tiene en un grupo social, por la posición que ocupa, aunque no tenga autoridad sobre él. Los factores que determinan en este caso el status pueden ser: el nacimiento y el origen, la edad, el sexo, la raza, clase social o la profesión. El status es diferente según la cultura y puede ser adjudicado o adquirido generalmente por rendimiento.

Status y rol adscrito y adquirido

Según Linton, creador de estos conceptos, hay dos formas de status: el asignado también llamado adscrito, y el logrado o adquirido.

Status adscrito: es el que se asigna en relación con la cuna o con otros factores independientes de la voluntad del individuo y de sus cualidades o diferencias innatas. Las bases más comunes para la adscripción de status son la edad, sexo, raza, religión, clase social, mérito, etc. Según la etapa de la vida en que se encuentre, el individuo ocupa status adscritos distintos. La edad proporciona la base fundamental sobre la que la sociedad adscribe distintos status a sus miembros, con casi una absoluta independencia de las cualidades específicas del individuo. Los status y roles adscritos se imponen al individuo. Clasificar a las personas por esta forma de estatus es propio de sociedades muy tradicionales.
Status y roles adquiridos: son aquellos que exigen ciertas cualidades y se obtienen por propia decisión y por los actos. No se asignan al individuo desde que nace, sino que se alcanzan por los esfuerzos, el azar y la competencia con otros, por ejemplo el status de profesor, de esposo, de campeón olímpico, científico, etc. Típico de sociedades modernas.

También podemos hablar de:

Status objetivo, asignado por la sociedad, la cultura o el grupo particular en donde se desenvuelve la persona y que es adquirido cumpliendo algunos o varios criterios que lo determinan. Podemos definirlo como status principal, siendo el status clave que identifica al individuo socialmente y le sitúa en la estructura social. Este status dependerá del tipo de sociedad, de manera que como en la nuestra se valora el éxito económico, es por lo que el status dominante suele ser el profesional.
Status subjetivo, siendo el que una persona cree tener sin poseer ninguna aprobación social o cultural y sin cumplir algún criterio que soporte el status del cual hace alarde.

Incongruencia y discrepancia de status

Incongruencia de status: Se produce cuando uno de los varios roles de un status se contradice con los restantes. La incongruencia origina frustración y fracaso de rol. Por ejemplo, ser mujer y querer ser torero, ser gitano y querer desempeñar un cargo público.

Discrepancia de status: Se produce cuando al individuo no se le reconoce el status que él quiere poseer. Es un sentimiento subjetivo por el que el individuo considera infravalorada su función social y cree que posee un status inferior al que debiera corresponderle.

Conducta de rol y personalidad

Se entiende por personalidad de rol aquellos rasgos y características de la personalidad necesarios para representar eficazmente un rol. Es por esto que en las selecciones de personal los responsables realicen test psicológicos con el fin de situar a cada empleado en aquellos cargos en los que se adapte mejor su personalidad a la personalidad del rol.

Conducta de rol es la representación del rol por una persona, que adapta ese rol a sus propias formas personales. Es la ejecución real del rol. Esta actuación de un rol puede corresponder o no a las expectativas de otros y por ello podemos distinguir entre:

Rol esperado o prescrito: es la conducta que se espera de quien ocupa una posición social; el modo en que la sociedad espera que el sujeto cumpla con el rol asignado. Este rol depende de las percepciones de los demás.
Rol percibido: es el conjunto de conductas que el ocupante de la posición cree que debe llevar a la práctica; puede corresponder o no al rol esperado. En la mayoría de los casos existen bastantes coincidencias entre el rol esperado y el percibido.
Rol ejercido o desempeñado: es el conjunto de conductas que el ocupante lleva a cabo de hecho; es la forma en que una persona ejecuta efectivamente un rol específico. Puede ser diferente del rol esperado y del rol percibido.

Tensión, conflicto de roles y fracaso de rol

Si por cumplir un rol se entra en conflicto con otro rol, entraremos en lo que se conoce como conflicto de roles, al producirse un conflicto entre las expectativas que da el desempeño de un papel y la conducta real.

Existen dos tipos de conflictos de roles:

Cuando dos roles diferentes demandan conductas conflictivas. EJ. El policía que tiene que detener a un amigo (rol policía vs rol amigo) el compañero de clase que nos pide ayuda en un examen (rol compañero vs rol alumno), etc.
Cuando presiones conflictivas se manifiestan en el seno de un mismo rol. Como por ejemplo el de la mujer casada, ya que nuestra cultura no define pautas muy claras y hace que algunas esposas soporten la presión entre la permanencia en el hogar y la dedicación familiar por un lado, y por otro, todo lo que la induce a emplearse para que la familia pueda vivir mejor.

El conflicto de roles se resuelve mediante las siguientes técnicas:

Racionalización es un proceso mental y psicológico mediante el que el individuo redefine inconscientemente la situación en términos más aceptables llegando a creerse honestamente las justificaciones creadas. La racionalización alivia el conflicto porque permite ignorarlo, pero éste no desaparece, simplemente disimula su existencia.
Compartimentación es el recurso por el que uno aísla los roles conflictivos en distintos casilleros, de modo que una conducta no choca con la otra por pertenecer a momentos distintos. Los uniformes, las togas y otras prendas rituales separan y aíslan la representación de roles distintos; uno puede ser el verdugo duro por la mañana y el más afable y bondadoso padre por la tarde. Las conductas contradictorias se hacen soportables al situar cada rol en su contexto correspondiente sin tratar de mezclarlos.
Adjudicación es un mecanismo consciente e intencional, en el que un tercero toma la decisión en caso de conflicto o antes de que el conflicto se dé. Es el caso de declaraciones de ética profesional, limitando los posibles conflictos que pudieran surgir en el desempeño de su profesión.